Manifiestos (o antimanifiestos) queer (o no) generados durante el Laboratorio corporal. Identidades Queer.
Resistencia al manifiesto
Resisto a los formatos con las casillas H y M de masculino. Resisto con la piel y el organismo alterado por las cicatrice-X del acné improvisado que llegó a una mala hora, después de la “tierna” infancia. Cuando era una obligación vestir de azul y aguantarse como los H. ¡No llorar! Resisto a otras cicatrice-XY- por el corte de la navaja de una mala rasurada. Resisto al dominio y escarnio público por el afecto de las enzimas alborotadas en nuestras bocas: ninguna con labial.
Resisto desde las hojas en blanco que ayudan a mostrar el mundo ficcional y a veces igual de aterrador al que de pronto me encuentro: violaciones, asesinatos, romances, sueños, y uno que otro TRANsgresor de normas H&M. Resisto mientras acaricio a mi perrita casta y blanca que nada me cuestiona, salvó cuando quiere comer. Resisto mientras acaricio las hojas de otro libro rasposo, otra historia jota, otro poema del cuerpo. Resisto mientras acaricio el cuerpo de una noche, porque las relaciones con etiqueta y las de armario, no desean resistir otra caricia más.
Resisto con el cuerpo desperfecto, jeans, camisa a cuadros y bolsa de mano. Cremas, lociones, vitamina C, E y Zinc. Gel para el cabello y uno a base de agua. Resisto a las compras, pero también caigo en sus ofertas del 2x1 que a veces me traen suerte y así NOS conocemos mejor.
Combato la norma, combato el combate, genero mi género. Resisto al azul a lo cortés y a los buenos modales. Combato con las palabras, con las obras literarias de ayer y hoy. Batallo con la castración a veces obligada por otro “H”, y una mala relación de sentimientos/deseos y su “maquillaje” de pandita.
Michael Yhv. Pineda Moreno
juin 011
Manifiesto Privado
Est* Soy Yo:
* Escucho, siento y reflexiono sobre si mism*. Experimento, saboreo, toco, pruebo, degusto lo que me rodea y cocino mi Mi Vida.
Est* Soy Yo, Digo que No cuando quiero decir No y Digo que Sí cuando quiero decir Sí. Aprendo nuevos discursos para explicarme y construyo en colectivo nuevos códigos para comunicarme.
Proveedor@, am@ de casa, profesionista, activista, maestr@, compañer* de trabajo, ciudadan@ con Derechos, amig@, amante, mujer que elige No ser madre, hombre que elige Ser padre.
Este es Mi Cuerpo:
Curvilíneo, robusto, vibrante, amoroso, cálido, nutricio, abundante, expandido, deseante, fuerte, desnudo, diferente: el que Amo.
Soy poet@, hago poesía con Mi Cuerpo.
Resisto los estándares de belleza, prefiero la comodidad y la libertad. Tomo en cuenta las señales de mi cuerpo que me orientan y son mi voz verdadera.
Resisto la mercadotecnia voraz, las compras compulsivas que escoden quién Soy.
Canto, bailo, juego, disfruto mi sexualidad diversa.
Este es Mi Mundo:
Musical, hermoso, diverso, dinámico, caótico, complejo, violento, dominado por las leyes del mercado, demolido, lastimado, herido, angustiado, prejuiciado, agitado, estigmatizado, imperfecto, ignorante.
Resisto las dictaduras de género. Rechazo las violencias. Combato mi propia violencia.
Resisto a ser una persona convencional, normal, religiosa, pasiva.
Resisto el tráfico de mi ciudad, la política deshonesta, el conservadurismo, la heteronormatividad, el adultocentrismo, el eurocentrismo, la misoginia, la lesbofobia, homofobia, la bifobia, la transfobia. Combato la exclusión, las ideologías culpígenas, los abusos de poder, la injusticia social.
Soy hereje, rebelde, crític@ de mi cultura, amante de la belleza y aprendiz de la vida.
Y0 (*)
Manifesto Corporal
Me presento al mundo con mi cuerpo. Lo siento, escucho y vivo con él todo el tiempo. Es cúmulo de conocimientos, desde mis ancestros neardentales hasta mis hermanos postmodernos. Mis ideas y palabras son resultado de lo que he hecho, hago y haré con él.
Ahora lo renombre, sin importar condición física y sexual. Lo cubro o desvisto a mi antojo, a partir de mis impulsos más básico; lo altero o mantengo inocuo; lo resignifico y aumento sus potencialidades físicas, cognoscitivas y emocionales. Porque es él quien me ordena y sabe lo que hace, asumiendo todo lo que social e históricamente conlleva.
Me identifico con mi cuerpo. Me lo apropio, como con cualquier identidad o idea, producto de la cultura. Lo hago mío, como cualquier objeto, sentimiento o cuerpo, que me ayuda a estar presente plenamente. Con la ausencia de él los placeres, dolores e incertidumbres no tienen sentido.
Mi cuerpo lo es todo. Es mi universo, al mismo tiempo, una minúscula partícula en él. Lo único asertivo son las constantes transformaciones que tiene día a día. Es tan queer como tú o como yo; como fui o como seré.
Marco Antonio Flores
Junio, 2011
