La cuestión peluda. Sobre Pelos pelos, ensayo político-poético

Cecilia Núñez
(C-Queer. Laboratorio Corporal / Universidad de Buenos Aires)



Ser una mujer peluda podría estar asociado con ser una mujer “poco preocupada” por su “aspecto personal”, es decir que no dedica largas horas al ritual de construir la feminidad: depilar o rasurar (de preferencia depilar para no dejar rastros), maquillar, peinar y seleccionar cuidadosamente el resto de las prótesis, como las faldas, los escotes y los tacones. El bigote de Frida Kahlo puede ser considerado, ante la mirada de nuestros días, como un rasgo distintivo de un ser ya de por sí fuera de lo común, también es frecuente relacionarlo con una limitante de la belleza: un rostro de mujer no es bello si tiene pelo en la cara. Sin embargo, el pelo en el rostro de un hombre puede reforzar positivamente los signos de la masculinidad, como la autoridad, la experiencia del mundo y la dureza.

Dice el discurso científico que las glándulas hormonales (masculinas o femeninas) secretan sustancias que, en mayor o menor presencia en un cuerpo, producen algunas “diferencias”, como la presencia de pelo en el rostro, el tono de la voz o la condición interna-externa de los órganos genitales. El discurso de la ciencia se presenta con firmeza en el siglo XXI, no sólo con un afán de encontrar explicación a preguntas trascedentes para la humanidad, también ha reforzado las vías en que las sociedades justifican la mirada de la naturalidad.
Los productos de la industria del cuerpo, por su parte, nos conducen a mantener rígidos los parámetros de asepsia, donde el cuerpo sin vello es indisociable de la imagen de un cuerpo higiénico. En diferentes momentos de nuestra cotidianidad también es posible comparar las relaciones que un cuerpo masculino, por una parte, y un cuerpo femenino por otra, traman con la cuestión peluda. No fue suficiente tomar prestadas las navajas de afeitar de los maridos cuando en los años 30 la ropa se relajó para mostrar un poco más de piel, la “nueva necesidad” es inmediatamente detectada por la empresa Gillette y ésta lanza al mercado navajas específicas para el uso de las mujeres: más suaves y de color rosa. El ritual implica además volver más específicas las estrategias para acabar con distintas zonas velludas del cuerpo: axilas, piernas, brazos, dedos de las manos, “área del bikini” (un eufemismo de “zona genital”, o la justificación para depilar una región del cuerpo prácticamente invisible en la interacción social de éste en el espacio de lo público. Una vez escuché a una biomujer decir sobre otra biomujer que se manifestaba en topless con consignas sobre su cuerpo: “enseña las tetas, además está gorda y ni siquiera se rasuró las axilas”. Los pelos incomodan, como incomoda la gordura, un par de tetas colgantes o cualquier otra imagen del cuerpo que no quepa en los parámetros de lo visible. “No hay libertad política si no hay libertad sexual”, era la consigna principal de la marcha donde ambas participan.


Além es un colectivo de artistas brasileros con la inquietud de producir pensamientos que transformen las conductas aprendidas: es una forma irreverente de ver el cuerpo frente a la moral que norma los procesos simbólicos que atraviesan a una persona. Las fotografías del proyecto Pelos Pelos conforman un ensayo político-poético que invita a redefinir la mirada sobre la naturalidad del pelo en los cuerpos y, a la vez, la propia concepción de naturalidad.
Este trabajo fotográfico incita a replantear nuestros modos de ver: a detectar los dispositivos que, tanto en lo dicho como en lo no dicho, tienden una serie de redes (discursos, instituciones, enunciados científicos, premisas morales, ideológicas etc.), así como la naturaleza misma del vínculo que existe entre los elementos heterogéneos. En estas imágenes es posible acercarse a los cuerpos del cotidiano como territorios donde la relación saber/poder tiembla desde los cimientos de su propia estructura, a partir de una postura política y de la invitación a seguir construyendo un espacio de expresión no terminado.

http://pelospelos.tumblr.com

Texto publicado originalmente en Registro mx
http://registromx.net/ws/?p=3590

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